La Comisión de Marketing aborda cómo hacer negocios en los países asiáticos
El economista Rubén García-Quismondo analiza las formas de inversión y negocio que presenta la región asiática
China y la región Asia-Pacífico fue objeto de análisis en la sesión de la Comisión de Marketing celebrada el pasado 22 de octubre, que contó con la participación del economista Rubén García-Quismondo, socio director de Quabbala Abogados y Economistas. En la sesión se analizaron las formas de inversión y negocio que presenta una de las más importantes regiones económicas a nivel mundial.
En este sentido, el ponente habló de Hong Kong, que, con una población de más de siete millones de habitantes, se posiciona como la mejor vía de acceso al mercado asiático, gracias a su consideración de región administrativa especial y las ventajas que ofrece a las empresas extranjeras su sistema legal y financiero. Además, Hong Kong ocupa el tercer puesto en el ranking mundial sobre facilidad para hacer negocios y crear una empresa, según el informe Doing Business del Banco Mundial, tras Singapur y Nueva Zelanda. Tiene unas de las tasas impositivas más bajas de mundo, no hay IVA, ni impuestos sobre las ventas, plusvalías, dividendos o sucesiones. "Hong Kong sigue siendo la economía más libre del mundo", aseguró García-Quismondo. El principal inconveniente para establecerse allí es el elevado precio del alquiler en la cuarta ciudad más densamente poblada del mundo.
China es y será la gran potencia regional. Según explicó el economista, actualmente el 94% de la población vive en el sudeste del país, que representa solo un 43% de todo el territorio. La reorganización de la población en China es uno de los mayores problemas a los que se enfrenta, dando lugar a oportunidades de inversión en planificación territorial, infraestructura, arquitectura y diseño. Para poder sostener la migración del campo a la ciudad, se están creando grandes ciudades como Jing-Jin-Ji, que podrá albergar a más de 130 millones de personas. Más que toda la población de Japón.
Para hacer negocios en China, conviene saber que allí se establecen antes las relaciones personales que los negocios, se consulta con el grupo antes de tomar una decisión y se antepone la cortesía a la sinceridad. "Le observarán y juzgarán por todos los aspectos de su conducta profesional y personal", advirtió García-Quismondo, quien comparó con detalle los aspectos laborales, mercantiles y fiscales de China y Hong-Kong. En este sentido, explicó que los costes laborales en China están incrementando y la demanda de personal cualificado es más alta que la oferta. "Sólo el 27% de los estudiantes de secundaria continúan con su educación en la universidad".
En este sentido, el ponente habló de Hong Kong, que, con una población de más de siete millones de habitantes, se posiciona como la mejor vía de acceso al mercado asiático, gracias a su consideración de región administrativa especial y las ventajas que ofrece a las empresas extranjeras su sistema legal y financiero. Además, Hong Kong ocupa el tercer puesto en el ranking mundial sobre facilidad para hacer negocios y crear una empresa, según el informe Doing Business del Banco Mundial, tras Singapur y Nueva Zelanda. Tiene unas de las tasas impositivas más bajas de mundo, no hay IVA, ni impuestos sobre las ventas, plusvalías, dividendos o sucesiones. "Hong Kong sigue siendo la economía más libre del mundo", aseguró García-Quismondo. El principal inconveniente para establecerse allí es el elevado precio del alquiler en la cuarta ciudad más densamente poblada del mundo.
China es y será la gran potencia regional. Según explicó el economista, actualmente el 94% de la población vive en el sudeste del país, que representa solo un 43% de todo el territorio. La reorganización de la población en China es uno de los mayores problemas a los que se enfrenta, dando lugar a oportunidades de inversión en planificación territorial, infraestructura, arquitectura y diseño. Para poder sostener la migración del campo a la ciudad, se están creando grandes ciudades como Jing-Jin-Ji, que podrá albergar a más de 130 millones de personas. Más que toda la población de Japón.
Para hacer negocios en China, conviene saber que allí se establecen antes las relaciones personales que los negocios, se consulta con el grupo antes de tomar una decisión y se antepone la cortesía a la sinceridad. "Le observarán y juzgarán por todos los aspectos de su conducta profesional y personal", advirtió García-Quismondo, quien comparó con detalle los aspectos laborales, mercantiles y fiscales de China y Hong-Kong. En este sentido, explicó que los costes laborales en China están incrementando y la demanda de personal cualificado es más alta que la oferta. "Sólo el 27% de los estudiantes de secundaria continúan con su educación en la universidad".